Year 2007 | Vol. 18 | Issue 2
Influencia de factores sociodemográficos en actividad de enfermedad, estado funcional y calidad de vida de pacientes con artritis psoriásica
Objetivo: Determinar la influencia de factores sociodemográficos en las manifestaciones clínicas, actividad de la enfermedad, estado
funcional y calidad de vida de pacientes con artritis psoriásica(APs).
Métodos: Se incluyeron 148 pacientes con APs reclutados de varios centros de reumatología de Argentina. Se determinaron factores sociodemográficos: edad, sexo, raza, nivel de educación, fuentes de ingreso personal, escala de Graffar y clases sociales. Al inicio de la enfermedad se evaluaron las siguientes variables: edad al inicio, duración de la enfermedad, manifestaciones clínicas y forma clínica de presentación. La actividad de la enfermedad fue evaluada mediante número de articulaciones activas, escala visual análoga (EVA) global
del paciente y BASDAI. El estado funcional y la calidad de vida de los pacientes se determinó por medio de BASFI, ASQoL y SF-12 (Versión 1.0). Para el análisis estadístico de los datos obtenidos se utilizó test de Chi-cuadrado, test exacto de Fisher y test de Kruskal-Wallis.
Resultados: De los 148 pacientes, 58,8% fueron mujeres con una edad media al inicio de la enfermedad de 53,2 ± 13,6 años y una duración media de enfermedad de 9,3 ± 8,9 años. La edad al inicio, el sexo, la raza y la escala de Graffar no estuvieron asociados con manifestaciones clínicas, actividad de la enfermedad, estado funcional y calidad de vida. Los pacientes de clase social baja presentaron EVA global del paciente más elevado (5,3 ± 3.0 vs. 4,3 ± 2,5, p=0,0003), mayor BASDAI (4,3 ± 2,8 vs. 4,0 ± 2,3, p=0,02), mayor BASFI (4,0 ± 3,3 vs. 3,0 ± 2,8, p=0,0003) y mayor ASQoL (7,9 ± 5,9 vs. 5,4 ± 4,6, p < 0.0001) y menor SF-12 componente físico (33,4 ± 9,6 vs. 36,0 ± 10,8, p=0,0015) que aquellos de clase social alta. Por otro lado, pacientes con estudios universitarios presentaron menor número de articulaciones inflamadas (1,3 ± 1,9 vs. 4,3 ± 6,1, p=0,02), menor EVA global del paciente (3,0 ± 2,5 vs. 5,4 ± 2,9, p=0,0011), menor BASDAI (3,1 ± 2,0 vs. 4,6 ± 2,6, p=0,03), menor BASFI (1,0 ± 1,2 vs. 4,3 ± 3,2, p < 0,0001), menor ASQoL (2,5 ± 3,3 vs. 7,9 ± 5,7, p < 0,0001) y mayor SF-12 componente físico (36,4 ± 14,5 vs. 33,0 ± 10,4, p =0,0083) que pacientes con nivel de estudios primarios.
Conclusiones: Pacientes con APs de clases sociales bajas tuvieron mayor severidad de enfermedad. El nivel universitario de los pacientes estuvo asociado con menor actividad de la enfermedad, mejor estado funcional y mejor calidad de vida. Estos hallazgos evidencian el impacto de ciertos factores socioeconómicos en la evolución de pacientes con APs.
funcional y calidad de vida de pacientes con artritis psoriásica(APs).
Métodos: Se incluyeron 148 pacientes con APs reclutados de varios centros de reumatología de Argentina. Se determinaron factores sociodemográficos: edad, sexo, raza, nivel de educación, fuentes de ingreso personal, escala de Graffar y clases sociales. Al inicio de la enfermedad se evaluaron las siguientes variables: edad al inicio, duración de la enfermedad, manifestaciones clínicas y forma clínica de presentación. La actividad de la enfermedad fue evaluada mediante número de articulaciones activas, escala visual análoga (EVA) global
del paciente y BASDAI. El estado funcional y la calidad de vida de los pacientes se determinó por medio de BASFI, ASQoL y SF-12 (Versión 1.0). Para el análisis estadístico de los datos obtenidos se utilizó test de Chi-cuadrado, test exacto de Fisher y test de Kruskal-Wallis.
Resultados: De los 148 pacientes, 58,8% fueron mujeres con una edad media al inicio de la enfermedad de 53,2 ± 13,6 años y una duración media de enfermedad de 9,3 ± 8,9 años. La edad al inicio, el sexo, la raza y la escala de Graffar no estuvieron asociados con manifestaciones clínicas, actividad de la enfermedad, estado funcional y calidad de vida. Los pacientes de clase social baja presentaron EVA global del paciente más elevado (5,3 ± 3.0 vs. 4,3 ± 2,5, p=0,0003), mayor BASDAI (4,3 ± 2,8 vs. 4,0 ± 2,3, p=0,02), mayor BASFI (4,0 ± 3,3 vs. 3,0 ± 2,8, p=0,0003) y mayor ASQoL (7,9 ± 5,9 vs. 5,4 ± 4,6, p < 0.0001) y menor SF-12 componente físico (33,4 ± 9,6 vs. 36,0 ± 10,8, p=0,0015) que aquellos de clase social alta. Por otro lado, pacientes con estudios universitarios presentaron menor número de articulaciones inflamadas (1,3 ± 1,9 vs. 4,3 ± 6,1, p=0,02), menor EVA global del paciente (3,0 ± 2,5 vs. 5,4 ± 2,9, p=0,0011), menor BASDAI (3,1 ± 2,0 vs. 4,6 ± 2,6, p=0,03), menor BASFI (1,0 ± 1,2 vs. 4,3 ± 3,2, p < 0,0001), menor ASQoL (2,5 ± 3,3 vs. 7,9 ± 5,7, p < 0,0001) y mayor SF-12 componente físico (36,4 ± 14,5 vs. 33,0 ± 10,4, p =0,0083) que pacientes con nivel de estudios primarios.
Conclusiones: Pacientes con APs de clases sociales bajas tuvieron mayor severidad de enfermedad. El nivel universitario de los pacientes estuvo asociado con menor actividad de la enfermedad, mejor estado funcional y mejor calidad de vida. Estos hallazgos evidencian el impacto de ciertos factores socioeconómicos en la evolución de pacientes con APs.